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Vivir y Sentir el Patrimonio

Coordinador: D. José María Navarro Jaén

Artistas

Didáctica

El Toque

Memoria

El Baile

Mujer

El Cante

Las Calles

La Zambomba

Vivir y Sentir el Flamenco

Plan de actuación

OBJETIVOS GENERALES QUE SE PRETENDEN ALCANZAR:

En la línea Vivir y Sentir el Flamenco se pretende vincular los procesos de enseñanza-aprendizaje a una manifestación artística, seña patrimonial de nuestra comunidad y patrimonio inmaterial de la humanidad, el Flamenco.

  • Valorar la riqueza estilística y artística de esta expresión cultural, así como la capacidad de inspiración que posee para otras manifestaciones artísticas.
  • Promover la valoración y el disfrute del Flamenco como expresión artística de fuerte raigambre andaluza y vocación universal.
  • Promover el conocimiento del Flamenco desde un punto de vista interdisciplinar, así como difundir las vivencias y sentimientos que causa el mismo entre alumnado y profesorado.
  • Ofrecer al resto de profesorado y alumnado propuestas educativas de interés relacionadas con el Flamenco.
  • Activar la participación de profesorado y alumnado en la generación, gestión y actualización de propuestas educativas creativas relacionadas con el Flamenco.
  • Motivar la producción y difusión de contenidos educativos sobre Flamenco, especialmente de carácter digital.
  • Reflexionar sobre… ¿De dónde partimos y a dónde queremos llegar?

Partimos desde la ley, es decir, la nueva ley autonómica que incluye el flamenco como materia de estudio en el currículo educativo. Nuestro punto de partida, es, además, nuestro entorno. Somos un centro situado en el barrio de El Zaidín en Granada con un alto porcentaje de alumnado inmigrante que no posee ningún tipo de conocimiento del flamenco. Por eso, este primer proyecto irá enfocado a solucionar dicha ausencia.

  • Concretar necesidades a las que dar respuesta mediante el proyecto.
  • Dar a conocer nuestro patrimonio inmaterial más universal a todo el alumnado del centro a través de diferentes actividades durante todo el curso.
  • Profundizar en el conocimiento del cante, el toque y el baile.
  • Acerca este arte de la forma más práctica………

Vivir y Sentir el Patrimonio

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Artistas:

Hecho con Padlet

El Toque:

No es otra cosa que el acompañamiento de la guitarra al cante. La guitarra flamenca es heredera directa de la clásica aunque adaptada a sus necesidades. Es más ligera, con una caja más estrecha y con una sonoridad algo menor que la clásica. Además, suele usar maderas diferentes (ciprés, abeto, cedro…).

En origen, el toque estaba indisolublemente asociado al cante. Muchos lo consideraban una cuestión puramente de acompañamiento. De hecho, se hablaba de «tocar atrás» en relación a ese segundo plano, tras el baile, en los que se situaban los guitarristas. Sentarse en la silla de enea al lado del cantaor le dará el respeto, la espera y la réplica adecuada al cante. Esa conjunción entre cante y toque, ese saber esperar, acompañar y enriquecer al cante ha sido, y sigue siendo, no ya una cuestión fundamental, sino de una belleza casi inigualable. Eso sí, a partir del primer cuarto del siglo XX van apareciendo una serie de guitarristas de tal calidad y virtuosismo que empiezan a no precisar acompañar a nadie.

Son varios los elementos propios del toque, aquí comentaremos los más conocidos e interesantes: rasgueos, arpegios, trémolos, punteos, golpeadores y falsetas. Quizá los más significativos del flamenco sean estos dos últimos. El golpeador ayuda con el compás. La falseta es una melodía que interpreta la guitarra sola entre las estrofas del cante. Los grandes guitarristas interpretan sus propias falsetas. Algunas de ellas han ido pasando de mástil a mástil a lo largo del tiempo. Ambos sirven para dar soporte armónico al cante.

Es imposible hacer un recorrido por los mejores guitarristas flamencos de la historia, así que nos centraremos solo en algunos de ellos:

  • Ramón Montoya: este guitarrista madrileño desarrolló su carrera en la primera mitad del siglo XX y fue el que acompañó a Antonio Chacón. Tenía una técnica impecable, un sonido dulce, además de un interés por recuperar e incorporar a su arte melodías perdidas. Ambos establecieron las bases y la forma actual de muchos palos flamencos. Fue de los primeros en dar a la guitarra la suficiente calidad y personalidad como para actuar solo.
  • El Niño Ricardo: Manuel Serrapí, que así se llamaba este sevillano nacido en 1904, es considerado el eslabón que une a Ramón Montoya con los guitarristas que se desarrollan sobre todo a partir de los 60 y 70. Acompañó a la Niña de los Peines y más adelante al propio Enrique Morente.
  • Sabicas: Agustín Castellón, navarro del que ya hemos hablado antes, es quizá el primer gran revolucionario de la guitarra flamenca. Su éxito fue enorme; tanto, que un disco suyo con Carmen Amaya fue disco de oro… en EE.UU. De enorme imaginación a la hora de componer y con una técnica exquisita, su obra tuvo una enorme repercusión en los guitarristas posteriores.
  • Paco de Lucía: El gran genio de la guitarra flamenca y uno de los guitarrista más reconocidos de la historia. Quizá, junto a Camarón, el gran genio del flamenco y uno de sus mejores embajadores dentro y fuera de nuestro país. Si de Sabicas decíamos que tenía una enorme imaginación y una calidad exquisita, para Paco de Lucía no tenemos calificativos. Su intuición, su calidad, su conocimiento de las raíces y su necesidad de ir más allá, le permitió convivir con otros estilos y músicos, entre los que destacó el jazz y la música clásica. Nadie había imaginado unas escalas más rápidas, ni los trémolos escalando el mástil, ni esas combinaciones de arpegios. Para poder seguir caminando se rodeó de músicos que permitieran mantener las bases rítmicas, melódicas, armónicas y también tímbricas (otra guitarra, el cante) del flamenco. Su guitarra comenzó a buscar la improvisación. Paco de Lucía Sextet es la formación que equiparó el flamenco al jazz y a cualquier música con capacidad para llenar multitudinarios escenarios internacionales.  Sea como sea, es imposible entender la guitarra flamenca sin Paco de Lucía.
  • Manolo Sanlúcar: A medio camino entre la pureza y la vanguardia se mueve este guitarrista de Sanlúcar de Barrameda nacido en 1943. La vida guitarrística de Manolo Sanlúcar avanza en torno a otras búsquedas. Su camino le ha llevado en muchas ocasiones a la tímbrica clásica, a la música de cámara, al concierto para guitarra y orquesta. Su recorrido como compositor ha necesitado de una teoría musical sobre los modos que asientan su forma de ver la estructura musical del flamenco emparentada con las teorías de civilizaciones antiguas.
  • Tomatito: José Fernández Torres, guitarrista almeriense está en el olimpo de los guitarristas flamencos. Tocó durante años con Camarón, lo cual, por sí solo, ya habla bien a las claras de su capacidad y su calidad. Al igual que Paco de Lucía, se acercó al jazz colaborando con Michel Camilo en un disco imprescindible: Spain.

El Baile:

El baile es la otra pata básica del flamenco junto al toque y al cante. Los tres forman ese triángulo mágico que podemos disfrutar y que está tan arraigado en nuestra cultura.

En el flamenco tradicional se establece una relación estrecha entre cante, toque y baile. Existen unas normas, una estructura de relación entre ellos. Esta estructura es flexible y ofrece muchas posibilidades. Cada bailaor o bailaora decide cómo organiza e interpreta las diferentes partes. Cuanto más tradicional sea, más fiel será a la estructura básica. Así, los elementos básicos del baile, muy resumidos y expuestos de forma esquemática son:

  • La salida. Es el momento en el que el bailaor o baliaora inicia el baile y se puede ejecutar de varios modos: si inicia con la falseta, es un baile más cadencioso y pausado mientras la guitarra remata la falseta; si inicia justo antes del cante, es quizá lo más común y suele iniciarse mientras suenan los ayes del cantaor; si inicia justo después del cante, ocurre cuando el cantaor termina el cante o, al menos, una estrofa y suele implicar un inicio más sorpresivo y, quizá, de mayor expresividad.
  • Durante las letras. El bailaor marca el tempo del cante y los acentos del ritmo con los pies y movimientos de brazos. Estos movimientos son conocidos como marcajes y paseos. Se ejecutan en sitio o desplazándose en el espacio lentamente. En el marcaje, el bailaor no hace sonidos fuertes con los zapatos, para no interrumpir el cante.
  • La escobilla. Es el clímax del baile flamenco. Es la parte donde el bailaor ejecuta una composición rítmica entera con un zapateo. Un baile puede tener una o dos escobillas, una breve al principio después de la primera letra y otra más elaborada después de la segunda letra. Hacia el final de cada escobilla, el bailaor aumenta la velocidad del ritmo hasta culminar con un remate, cierre o llamada.
  • El final o remate. Se caracteriza por su aceleración de ritmo. Se canta una última letra, conocida como estribillo, macho o letra de cambio. Cada palo culmina con un tipo de letra específico. Las alegrías y soleares se suelen terminar con bulerías. Las farrucas y los tientos se terminan con tangos.

De nuevo no podemos hacer un recorrido por los bailaores y bailaoras más importantes de la historia; pero sí podemos proponer algunos de los nombres más importantes, de modo que puedas acercarte algo a la historia del baile flamenco:

  • Pastora Imperio: De estirpe de bailaoras (su madre fue la gaditana La Mejorana), esta bailaora sevillana se convirtió en una de las más cotizadas de su época. Participó, de hecho, en varias películas, aunque quizá su actuación más reconocida fue la del estreno del Amor Brujo, la célebre obra de Manuel de Falla.
  • Vicente Escudero: Este bailaor y coreógrafo vallisoletano nacido en 1888 tuvo un recorrido internacional de enorme valor. De hecho, su primera actuación oficial fue nada menos que en Teatro Olimpia de París. Sus éxitos en la capital francesa le llevaron a recorrer prácticamente todo el mundo con sus espectáculos, pero siempre con un estilo fiel a la pureza y a la tradición flamencas.
  • Carmen Amaya: Esta gitana, barcelonesa de nacimiento, fue bailaora y cantaora, y alcanzó también una enorme fama sobre todo en España, participando en numerosas películas. En cualquier caso, su trascendencia viene de su capacidad para transformar el baile. Podemos decir que creó una nueva escuela, una nueva forma de bailar basada, sobre todo en la expresividad y en la pasión para lo cual, su zapateado resultó fundamental. Su baile dejó huella y marcó un antes y un después.
  • Antonio Gades: Antonio Esteve Ródenas nació en Elda, Alicante, el año del inicio de la Guerra Civil. De familia humilde, su relación con el baile le llegó de la mano de la coreógrafa Pilar López, que fue su mentora y descubridora. Gades ha pasado a la historia como uno de los grandes bailarines y, sobre todo, coreógrafos de la historia del flamenco. Un auténtico renovador aunque siempre respetando la pureza y las fórmulas tradicionales. Su etapa de formación clásica le dio un bagaje y una fama que aprovechó a la perfección. Trabajó con gente tan variopinta como Nureyev, Vittorio Gassman o Carlos Saura.
  • Farruco: Antonio Montoya Flores fue un bailaor nacido en Pozuelo de Alarcón en los años 30 del siglo pasado. Ha sido uno de los grandes del siglo XX y de él se dice que destacaban su arte, su pasión y su poderío, además de ser el patriarca del baile gitano. Comenzó nada menos que en la compañía de Lola Flores y Manolo Caracol, con quienes desarrolló una exitosa carrera. Su nieto es Farruquito, uno de los bailaores mejor considerados en la actualidad.
  • Sara Baras: Esta bailaora y coreógrafa del Puerto de Santa María es uno de los rostros más conocidos del baile flamenco de los últimos 20 años. Con su compañía ha girado por todo el mundo, cosechando tremendos éxitos en ciudades como París o Nueva York. Sus colaboraciones con músicos y composiciones más allá del flamenco han sido francamente interesantes, como Josep Carreras con quien homenajea a Falla, Albéniz, Turina o Lorca, o como con Javier Ruibal, con quien colaboro en un Carmen para el Teatro Falla de Cádiz.
  • Israel Galván. El bailaor sevillano nacido en 1973 se ha convertido en uno de los grandes reformadores del baile flamenco. Hijo de bailaores, empezó muy pronto y con apenas 20 años entró a formar parte de la Compañía Andaluza de Danza, dirigida entonces por Mario Maya con el que colaboraría de forma intensa posteriormente. En 1998 estrena su primer espectáculo propio con un tremendo éxito de crítica y público. La crítica, por cierto, ya habla de él como ese gran reformulador del baile que comentábamos antes. Su relación con artistas de otros campos le lleva a trabajar con propuestas basadas, por ejemplo, en el músico Gyorgy Ligeti o Franz Kafka con su celebrada Metamorfosisdel año 2000. Para este espectáculo, por cierto, contó con la colaboración del otro gran revolucionario del flamenco de finales del XX: Enrique Morente. Técnicamente, Israel Galván se caracteriza por haber creado un lenguaje expresivo propio, con complicados movimientos de pies que él mismo en algún momento vinculó al cubismo (movimientos fragmentados, juego de planos con brazos y piernas…

La evolución del baile flamenco

El baile y la música actual es el resultado de siglos de evolución, integración y unificación de elementos de diversas culturas. Con el desarrollo de la música flamenca surgió también el del baile flamenco, que apareció por primera vez, de modo reconocible como una danza estructurada, en el siglo XVIII.

Al principio, la atención del flamenco se centraba en la voz del cantante, pero poco a poco en las actuaciones que se hacían en los  antiguos café cantantes, la pasión que derrochaban los bailaores sobre el escenario fue llamando la atención del público y el baile comenzó a robarle protagonismo al cante.

En un show flamenco, el papel de la bailaora o bailaor flamenco es el de interpretar físicamente la letra de la canción, con movimientos suaves y elegantes que contrastan, en ocasiones, con intensos ‘taconeos’ o giros.

Los dúos, llevados a cabo generalmente por un hombre y una mujer, suelen ser también bailes muy intensos y con altas dosis de emotividad, ya que los bailaores mantienen una especie de competición en la que entran en juego la pasión, tensión y emoción.

En un espectáculo, tras los primeros compases de música y voz, cuando se inicia el baile, el artista interpreta el palo en cuestión con todo su cuerpo: brazos, piernas e incluso con la expresión de su cara.

Tipos de bailes flamencos

La estructura de la pieza, los movimientos y la intensidad de la interpretación depende del tipo de baile flamenco que se realice. Aunque más que hablar de ‘tipo de bailes’, lo más correcto es hacer referencia a palos flamencos, de los que hay más de 50 diferentes, una muestra de la riqueza y variedad que posee este arte de raíces andaluzas.

Cada palo tiene su compás, un origen (cantes de fragua, de fiesta, de ida y vuelta…), un tipo específico de letra y una música que diferencia a unos palos de otros. Una característica que tiene en común el cante, la música y el baile flamenco es el alto grado de improvisación del intérprete, ese ‘sello personal’ con el que el artista firma su actuación y que hace que cada interpretación sea única.

Entre la variedad de bailes flamencos, los más populares y conocidos son los siguientes:

  • Soleá: es uno de los bailes más ejecutados por los artistasy por su tipo de movimientos se adapta mejor a las mujeres. Es un palo triste, que se interpreta con movimientos de brazos, ondulaciones de cadera y quiebros de cintura. Las letras hablan de penas, de pérdidas, de amor, de muchos otros temas pero siempre con sentimiento profundo. Se bailan las letras que el bailaor quiera, luego una escobilla de pies (zapateado) y suele terminar por bulerías.
  • Bulerías:es un cante festero por excelencia y se usa como culmen de otros bailes (como la soleá o alegrías, por ejemplo). También suele ser el palo para lo que en flamenco se denomina ‘fin de fiesta’, el bis tras un espectáculo. Es el más alegre y divertido de todos los bailes y se distingue por su ritmo rápido, sin duda, hecho para bailar.
  • Alegrías: conorigen en Cádiz, es el baile flamenco más antiguo. Tanto es así, que gran parte del resto de palos flamencos toman como base las alegrías para componer su coreografía. Se caracteriza por la musicalidad los tonos de la guitarra. El baile por alegrías a veces comienza por una entrada de cante antes de la letra; tras la letra (suelen ser dos o tres, pero lo decide el bailaor/a), viene el silencio y después, la castellana, a la que sigue una escobilla de pies o zapateado. Las alegrías se suelen terminar por bulerías, casi siempre bulerías de Cádiz o de Jerez.
  • Seguiriyas:es un baile sobrio, de compás lento y pausado. Su paso fundamental consiste en un andar rítmico a base de golpes secos, sonoros y cortados, realizando el bailaor un movimiento de avance y retroceso sobre el mismo espacio.
  • Tangos: hay mil variedades de tangos (de Málaga, del Piyayo, etc.) y es un palo muy bailable. Los tangos son, como las alegrías o las bulerías, otro palo festero. Su ritmo alegre y su compás medido permite que sea interpretado con movimientos de gran brillantez y expresividad.
  • Farruca: con origen en Galicia, es un palo que tiene mucha dificultad y exige un nivel alto de ejecución. Es más un baile de hombre que de mujeres, hasta el punto que cuando lo interpreta una mujer ésta lo baila con pantalones, a fin de resaltar el zapateado característico, acompañándose de pitos.
  • Es quizá el palo menos flamenco (a caballo entre el flamenco y el folclore andaluz), pero es con diferencia el más conocido y el que más personas bailan. Se compone de 4 sevillanas con sus letras, que tienen siempre una misma duración y una misma estructura de baile: paseíllos, pasadas, careos y remate.

El Cante:

Son aproximadamente 60 los palos flamencos que existen. Ya sabes que un palo flamenco no es más que una variedad tradicional del cante flamenco. Pues eso, calcula que hay cerca de 60 formas distintas de interpretar el cante.

Algunos de estos palos están más en uso que otros. Es cierto que hay palos que prácticamente se han abandonado o que rara vez se trabajan. Pero también lo es que el espacio en el que se interpreta el cante determina, en cierto modo, el tipo de palo que se va a usar. No suele ser habitual, por ejemplo, que en grandes espacios se interpreten cantes o palos más intimistas y quizá más clásicos o tradicionales como las jaberas, los martinetes, los polos o las romeras. Además, hay momentos específicos para algunos palos, como la Alboreá, asociadas a las bodas gitanas o la Saeta, que no hace falta que te indiquemos que está íntimamente relacionada con la Semana Santa.

No podemos parar a explicar cada uno de los palos flamencos; primero porque son demasiados, segundo porque muchas veces las diferencias son pequeños matices y tercero porque para diferenciarlos, a veces, hay que conocer aspectos musicales que no vienen al caso en una materia como esta.

Sea como sea, sí queremos indicar cuáles son los más importantes, cómo se diferencian y qué otros palos parten de ellos. Para que lo tengas claro y te resulte más accesible te hemos preparado dos documentos: el primero es un mapa conceptual con los principales palos y cuáles emanan de cada uno. El segundo es una presentación con los más destacados. En ella hemos incluido vídeos con ejemplos de cada uno así como un pequeño recorrido histórico y alguno de los cantaores o cantaoras que destacaron con estos palos y que hicieron que estos brillaran.

Si eres aficionado al flamenco seguramente hayas oído hablar del máximo galardón que se concede en el cante: la Llave de Oro del Cante. Es una historia curiosa esta porque todas y cada una de sus 5 entregas han estado rodeadas de agrias polémicas. Lo que sí está claro es que, de un modo u otro, trata de premiar al cante más puro y su afán por conservarlo según las pautas originales (si es que eso existe en cualquier expresión artística).

Sus ediciones, por llamarlas de algún modo puesto que no responden a convocatorias oficiales ni a concursos con bases y premios más allá del puro reconocimiento, han sido las siguientes.

PRIMERA LLAVA DE ORO DEL CANTE: se le concedió al cantaor de El Puerto de Santa María Tomás El Nitri, en el año 1868. No está nada claro en qué circunstancias se otorgó el premio; es más, ni siquiera se sabe a ciencia cierta dónde se entregó. Unos dicen que en Málaga, en El Café Sin techo, otros que en Carmona, otros que en Jerez. Tampoco se sabe quién decidió otorgarlo. Algunos estudiosos incluso indican que fue simplemente un grupo de gitanos amigos del propio Nitri para nombrarlo como el mejor cantaor del momento.

SEGUNDA LLAVE DE ORO DEL CANTE: fue entregada a Manuel Vallejo, cantaor sevillano, en el año 1926. La cuestión fue también algo polémica. Estamos en plena época de los café cantante y en el inicio de la ópera flamenca (tan denostada por algunos) cuando Manuel de Falla y Federico García Lorca organizan en el Teatro Pavón, en Madrid, la Copa Pavón: un concurso de cante jondo del que el cantaor sevillano salió triunfal. En el concurso del año siguiente, el premio recae sobre Manuel Centeno, lo cual es visto como un agravio por Vallejo y sus seguidores que, en ese momento, deciden recuperar el premio de la Llave del Oro del cante y otorgárselo al cantaor sevillano.

TERCERA LLAVE DE ORO DEL CANTE: sí, también se vivió con polémica. En este caso, el galardón aparece vinculado a un concurso concreto, el Concurso Nacional de Arte Flamenco, que sería premiado con 100.000 pesetas y esta Tercera Llave de Oro del Cante. El concurso lo ganó el cantaor de Mairena del Alcor Antonio Mairena por unanimidad. Ocurre que se decía que el concurso estaba preparado de antemano para que lo ganara Antonio Mairena con el objetivo de confirmar la hegemonía y las prácticas del estilo mairenero, lo que los autores llaman «mairenismo».

CUARTA LLAVE DE ORO DEL CANTE: la Junta de Andalucía, en 1984, registra este galardón y lo hace propio, concediéndolo por primera vez en el año 2000 a Camarón de la Isla. Es el único que se ha dado a título póstumo (celebrando el cinquenta aniversario de su nacimiento). De nuevo la polémica. Primero, por el hecho de darlo a título póstumo, considerado por algunos como algo que va en contra del espíritu mismo del galardón y que, en cualquier caso, hay decenas de cantaores y cantaoras que también lo habrían merecido. Segundo, por el hecho de que Camarón, precisamente y aunque fuera un profundo conocedor del estilo más clásico y puro del cante, no siguió esa línea jonda que se supone que tiene en cuenta el galardón.

QUINTA LLAVE DE ORO DEL CANTE: Fue concedida apenas 5 años después a Antonio Fernández Díaz «Fosforito» por su labor de «dignificación y universalización del flamenco, la relevancia de sus aportaciones creativas y su contribución a la revitalización de estilos en desuso». Quizá haya sido el menos polémico de los galardones, aunque no ha estado exento de ellos. Fue concedido por la Consejería de Cultura a propuesta de la Confederación de Peñas Flamencas de Andalucía.

La conexión entre los cantes flamencos y otros originarios de diferentes zonas del mundo son común en la historia del flamenco. Ya has visto que muchos de los palos más conocidos en la actualidad provienen de esos cantes de ida y vuelta que se les llama por su conexión con cantes o bailes que vienen de América (en general nacen en España con alguna forma determinada, llegan a América, allí se les dota del color y el espíritu latinoamericano y vuelven a la Península, sobre todo a Cádiz, para ser de nuevo reformulados; un auténtico viaje de ida y vuelta). Pero la mezcolanza de formas que determinan a los cantes flamencos a lo largo de su historia no tienen que ver solo con América. Hay otros cantes que se ven influenciados por modelos algo diferentes a lo que conocemos en la actualidad. Un ejemplo es la unión estrecha que existe entre la Jota y las Alegrías de Cádiz. Ojo, no son jotas puramente aragonesas, pero verás que la conexión con ella es muy estrecha.

Para que veas hasta qué punto existe esa vinculación, observa estos dos vídeos del flamencólogo, musicólogo y crítico musical gallego Faustino Núñez. En el primero podrás ver magníficamente bien explicado, y en apenas un minuto, cómo es esa conexión entre la Jota y las Alegrías de Cádiz. En el segundo, un poco más largo, entenderás cómo nace y cómo se conecta el Tango caribeño con los actuales tangos flamencos. Es una maravilla lo sencillo que lo hace y lo claro que queda. No dejes de verlos

La Zambomba:

La actividad que llevaremos a cabo en el mes de Diciembre girará entorno a una de las fiestas más famosas de Jerez de la Frontera y su relación con el flamenco. Estamos hablando de las Zambombas.

Lo primero que haremos será ver unos quince minutos del vídeo sobre la zambomba flamenca celebrada en la Peña Flamenca «Garbanzo de Jerez». Explicaremos a nuestro alumnado el significado de esta peculiar fiesta y leeremos algunas de las letras de los villancicos que se cantan en dicha fiesta.

En 2015, se declara Bien de Interés Cultural esta fiesta arraigada especialmente a la campiña gaditana (Jerez y Arcos de la Frontera), por su alto valor etnológico.

Sus orígenes datan del s. XVIII, cuando los vecinos se reunían en los patios para hacer dulces navideños mientras cantaban, tocaban las palmas y bebían. Poco a poco el repertorio se ha ido enriqueciendo con la incorporación de villancicos tradicionales, que se fusionan con el flamenco.

Actualmente grupos de vecinos, hermandades, tabancos, entidades privadas y también públicas, como el Instituto Andaluz del Flamenco, organizan las suyas propias, para contribuir a mantener esta tradición ideal para disfrutar en familia o con amigos.

Los más atrevidos cantaremos algunos de esos villancicos.

Didáctica

del

Flamenco

Guitarristas

Antonio Rey

Paco de Lucía

Ramón Montoya

Tomatito

Sabicas

Manolo Sanlúcar

Bailaores y bailaoras actuales

Oscar Quero

Claudia la Debla

Antonio Najarro

Amelia Vega

Eva la Yerbabuena

Emilio Ochando

Cantaores y cantaoras

Niña de la Puebla

La Bulería 2016

The children

Juan Breva

Carmen

S.Youth-E.Morente

El reencuentro

La Perla de Cádiz

Contreras y Chaparro

Dorantes con Grilo

Le flamenco dans

 Antonio Mairena

Camarón

Sabicas

Tp. de leyenda

 La escuela bolera

Paco de Lucía

Sonic-Enrique Morente

Smash

Morente-Lagartija Nick

Cuatro Trileros

Cantes Primitivos

Memoria

Flamenca

Hecho con Padlet

La mujer

en el

flamenco:

Hecho con Padlet